TÚ ERES LA SAL DE TU VIDA y 10 maneras de ayudar a tu energía usando sal.

Después de este eslogan facilon que me he sacado de la manga, que aunque tiene mucho de verdad es cierto que huele bastante a bolitas de alcanfor.

No se si os pasa a vosotras pero hay muchas veces que las frases pierden su valor cuando se repiten mucho en vano o cuando se frivolizan. Cuando nos hartamos de verlas en tazas, cojines, bolis, agendas… ¡Ojo! que me parece maravilloso que afirmaciones así estén presentes en nuestras vidas hasta en lo más cotidiano, y que seguro que un día cuando lo que más necesitas es oir justo eso, ¡Zas! te topas con la taza o con la valla publicitaria o con mi post, y si solo eso es suficiente para que te agarres un poquito más fuerte a esa energía nos hace ir hacia delante, pues bienvenidas sean.

Pero como veis una vez más no acabo más de empezar y ya me voy enredando sola. Y hoy hemos venido a hablar de la SAL.

La sal es como la vida misma. Nos rodeamos de gente maravillosa que está ahí lista para apoyarnos en todo y nosotros estamos como locos mirando hacia fuera, buscando siempre algo mejor. Cuando si nos detuviésemos un poco nos daríamos cuenta que mucho de eso que buscamos ya lo tenemos cerca.

Tenemos que empezar a mirar al mundo con otros ojos.

Como todo, la sal se ha convertido en algo tan habitual para nosotros, algo tan del día a día y económico que no le damos su verdadero valor.

Espero que después de leer este post tengas una nueva manera de mirar a la sal.

Ayer os colgaba en Instagram un video contando como hacía la sal de luna. Si os digo la verdad no tengo ni idea como aprendí a hacerla, se que me acompaña de siempre. Pero no soy capaz de recordar quien me lo enseñó ni cuando. No he encontrado mucha información por la red sobre la sal de luna, en cambio un montón sobre hacer agua de luna. Así que dije, bueno pues habrá que dejar legado de como lo hago y que así más gente se pueda animar. Porque sin duda es uno de los elementos más maravillosos con los que trabajo mi magia y mi conexión con la tierra.

Pero antes vamos a hacer las presentaciones pertinentes; Chicas aquí la sal uno de los elementos más poderosos con los que podemos trabajar y que nos regala la naturaleza de for free. Sal aquí nosotros tan inmersas en nuestro día a día que pocas veces nos paramos a ver el potencial de las pequeñas cosas que nos rodean. Ayyy…

A lo largo de la historia de todas las culturas la sal ha sido siempre un mineral tan importante que incluso en la antigua Roma llegó a ser la divisa con la que se pagaba a los trabajadores. ¿De dónde crees que viene la palabra salario?

Todas las culturas desde las africanas a las celtas usaban la sal como elemento de protección. Eso es así. Hasta los egipcios la veneraban. Los famosos círculos de protección que hacían los aquelarres eran con sal para evitar que ningún mal espíritu o mala energía pudiese hacerles daño. Se dice que es el elemento de protección más fuerte que existe por su tremenda capacidad de transmutar las energías densas en positivas. Tiene mucho mucho en común con nuestros queridos cuarzos y cristales, vamos que son primos hermanos.

Yo te voy a dar 10 motivos para usar la sal y como hacerlo de manera más efectiva.

1- Alarga la vida de tus velas:

Como lo oyes, sumerge tus velas en una solución de agua con sal durante unas horas. Sácalas y déjalas secar. La vela una vez encendida se consumirá más lento.

2- Úsala como base para tus inciensos:

En un cuenco pon bastante sal y clava tus inciensos para quemarlos. Los restos del incienso se mezclará con la sal, apagándolos y creando un grana amuleto para limpiar la energía del ambiente de tu casa. Un 2 x 1.

3- Ya lo dice el Feng Shui:

La filosofía del Feng Shui recomienda que pongas en cada rincón de las diferentes habitaciones de la casa unas pizcas de sal. Este ingrediente culinario va a absorber la mala energía de los antiguos residentes. 48 horas después de ponerla, solo tienes que quitarla de las esquinas y tirarla a la basura.

4- Quién traiga mala energía que se la lleve:

Pon un pequeño cuenco o vasito con sal en la entrada de tu casa. Evitará que las malas energías entren y se mantengan fuera. Si te visita alguien que traía algo malo hacia ti hará que esa persona no regrese por tu casa.

5- Limpiar energía a golpe de FLIS-FLIS (La nueva espada laser de los Jedi):

Llena un pulverizador con agua con sal y de vez en cuando pasa por las habitaciones de casa limpiando energías a golpe de flis-flis.

6- Dale esquinazo a mala suerte de la que aliñas la ensalada:

Sal y Pimienta. Así de fácil. Haz una pequeña mezcal de estos dos ingredientes mételos en una bolsita como amuleto o simplemente ponlos juntos en un cuenco en tu zona de trabajo o donde sientas que la suerte no te acompaña.

7- Phoebe Buffay (Fibi) de Friends contra el mal de ojo:

Puedes ir a comprobarlo, pero en varios episodios de Friends nuestra amiga Fibi se echa sal sobre los hombros mientras ayuda a Mónica a cocinar. Esta tradición es para alejar el mal de ojo o las envidias o malos deseos que puedan llegar de aquellos que tenemos a las espaldas. Así que ya sabes un poco en la ensalada y lanza otro poco sobre tus hombros.

8- Baños con agua y Sal:

Ya estás tardando en darte un baño, y si no tienes bañera sumerge los pies en agua con sal un buen rato. No solo harás una osmosis estupenda para tu cuerpo, si no que te limpiarás de toda energía negativa que tengas pegada. No es por nada pero mi preparado de sal “Seré mi amante bandida” que podéis encontrar en mi tienda es…. lo más.

9- Si tienes exámenes o entrevistas de trabajo llévate un salero:

No hace falta un salero pero si una buena bolsita con sal. Te ayudará a estar centrada y evitará que factores externos puedan alterarte.

10- El Fairy espiritual para tus piedras:

Limpia todas tus piedras, rara es la que no le va bien. Entierra tus piedras en sal y tendrás un limpieza excelente antes de cargar tus cristales. Cuidado con las soluciones en agua porque no todas las piedras la toleran bien. Así que para asegurar la sal es un gran opción.

Buen no está mal para empezar a tenerla en cuenta ¿no? Ya sabéis con cualquier duda me decís.

Es importante también que seáis usar cada tipo de sal, y aunque hay muchas variedades vamos a dividirlas en dos grupos: SAL DE MAR y SAL DE ROCA.

La sal de mar se obtiene por evaporación de agua y es ideal para temas emocionales, para limpiar y purificar.

La sal de roca, la más famosa es la del Himalaya, es más indicada para darnos fuerza a la vez de protección para aportarnos equilibrio y arraigo.

Así que debes de saber que no todas las sales son iguales y que a ser posible evites las sales yodadas para estos truquitos que te he contado.

Y ahora vamos con mi sal de luna y como la hago y para que la uso. Bueno usarla para todo lo que os conté ahí arriba pero además yo la uso en algunos productos de mi tienda. Como los saquitos protectores, las sales de baño, las velas, para limpiar las piedras antes de enviároslas, en mis lecturas… vamos que le saco partido y bien.

Cada luna llena recojo agua de luna en lugar cercano a mi casa. Solo se puede acceder en mareas vivas, es decir en luna llena o nueva. Ya que la mera se retrae tanto que deja la descubierto unas pozas en forma de lágrimas, yo las llamo “lágrimas de luna”, no es muy original lo se. Recojo el agua en un tarro de cristal y me lo llevo a casa. Allí uso mis conchas y caracolas como recipientes para hacer mi sal. Me gusta hacerlas en ellas porque se convierten en ese vientre materno en el que se forjará la sal, también de origen natural y procedente del mar. El agua se evapora en unos cuantos días y voy rellenando a medida que veo que se secan. En lo que dura el ciclo de la luna se va formando una capa de sal, que extraigo de cada cocha cada luna llena. Así quedan vacías para comenzar de nuevo con la energía de la Luna en un nuevo signo.

Es decir yo acabo de recoger la sal de luna llena en Virgo y he empezado a “sembrar” la sal de luna llena en Libra. Y como he visto que energía nos ha traído cada luna lo dejo anotado en su bote y así puedo ir organizándolas y usándolas mejor.

Bueno y hasta aquí puedo leer porque creo que ya ha ha estado bien de mis sermones por hoy.

Espero que os haya gustado y no dudéis en escribirme o comentare cualquier cosita, sabéis lo mucho que me gusta leeros.

Os dejo aquí com siempre espacio para que me hagáis llegar vuestros mensajes y si queréis dejarme algo en comentarios sería maravilloso.

¡Mil besos!